sábado, 27 de noviembre de 2010

CUANDO ME ABRUMA EL DOLOR

POEMA A MI HIJA ESPECIAL:


CUANDO ME ABRUMA EL DOLOR

Yo no Merezco tú amor!
Ya que mi indiferencia es tan
¡ Sólo por Dolor.!
Me educaron al nacer
Que primero está la Fe
Para así poder crecer.
Eres el dueño de mi vida
Desde antes de nacer en
El seno del saber.
Tuve muchas alegrías
Que jamás olvidaré
Con mi madre tan querida.
Fue mi mami quien me dio
El amor y el aprender
Hacia la Divina Ley
Pero pronto me casé
Y en mi vida encontré
El amor de cuatro hijos
Que eduqué con mucha Fe.
Cuando tuve la menor
Fue la gran satisfacción
La acunaba noche y día
Viendo en su rostro a” María.”
El tiempo fue pasando
Su patología avanzó
Buscaba profesionales
Ya no había solución.
A su lado estuve siempre
Con la fuerza de la Fe
Luchando toda mi vida
No la quería perder.!
Mi alegría terminó
Cuando tuve que vencer
Entregándole a mi hija
A Jesús de Nazareth.
Ella hoy está de fiesta
En un lugar muy especial
Velando por su mamá.
Que era a quien cuidaba más.
Rezaba sin cesar, desde
Siempre en el altar
No merezco ser amaba
Por Cristo que me anhelaba.
Lo que nunca comprendí
Por qué Jesús te hizo nacer?
Si un día partirías a ese cielo
Prometido, antes que partiera yo.
Nunca falté a Misa
Con mi hija comulgué
Con su silla la llevaba
Era mi gran placer.
Le gustaba su Colegio
Dibujar, participar
Cuando, iba a su Escuela
En los brazos de mamá.
La alegría de su vida
Era ir al restaurante
Donde habían unas mesas
Y comer junto a mamá.
Participó en cabalgatas
Se sentía superior
Desde arriba del caballo
Que era su gran ilusión.
Le pedía a su papá que la llevara
A pasear, ¡se sentía muy feliz
Cuando iba a comprar.!!
Sofía fue creciendo
Ya no podía estirar
Sus rodillas lesionadas
No entraba en ningún lugar.
Se frustraba cuando iba,
Con mamá y con papá
A los autos del gran Shopping ya no podía entrar.
Sus lugares favoritos
no podía visitar
Y su angustia ocasionaba
El dolor de papá y mamá.
Pero era muy feliz, cuando todas las mañanas, mamá la despertaba para llevarla a pasear, en su silla muy querida, para a todos saludar.
En los días de las Pascuas, la gente se acercaba más
Regalándole monedas como símbolo de paz.
Pero todo terminó cuando ya no pudo más
La internaron muchas veces y jamás, se puso mal.
Sofía vio mis lágrimas caer y
Me supo comprender.
Me dijo que la vida no es todo lo que se ve.
Les dijo a sus hermanos que cuidaran a mamá
Que era a mami a quien amaba, y no debe¡ jamás vencer.!
Estos tragos tan amargos
Pronto terminarán
Despidiéndome
De ella, cuando la vino a buscar, una señora de Blanco
Para ya no sufrir más.
Entregándome las llaves de ese hermoso lugar
Que me espera en la eternidad.
Siendo yo la única dueña, desde el cielo manejar, aquel
Que no valore, lo que hizo mi mamá.!!
Se que no es fácil la vida
Que juntas tuvimos que pasar
¡Pero te aseguro mami
Que estarás en mi lugar tú y mi papá.!
CRISTINA REVUELTA